La película «Perro come perro» es un thriller colombiano dirigido por Carlos Moreno y estrenado en el año 2008. La trama sigue la historia de Víctor Peñaranda, un sicario que roba una gran suma de dinero que debía entregar a su jefe, conocido como «El Orejón». A partir de este punto, la historia se desarrolla en una serie de eventos violentos y llenos de intriga que llevan a un desenlace impactante. En este artículo, analizaremos en detalle el final de la película y explicaremos cómo se resuelven los conflictos planteados a lo largo de la trama.
Robo del dinero y contratación de la bruja Iris
El desenlace de «Perro come perro» comienza con el robo del dinero por parte de Víctor Peñaranda. Después de cometer el robo, Peñaranda decide contratar a la bruja Iris para que lance una maldición al asesino de su ahijado. Esta decisión tiene graves consecuencias para Peñaranda y para aquellos que lo rodean.
La misión de Peñaranda y Benítez
Peñaranda y Eusebio Benítez son enviados por «El Orejón» para buscar el dinero robado. Durante su misión, Benítez comienza a sufrir las consecuencias de la maldición lanzada por la bruja Iris. Esto se manifiesta en forma de alucinaciones y paranoia, lo que dificulta aún más la tarea de recuperar el dinero.
Las consecuencias de la maldición
A medida que avanza la trama, las consecuencias de la maldición se vuelven cada vez más evidentes. Benítez se vuelve cada vez más inestable y violento, lo que pone en peligro la vida de Peñaranda y de aquellos que se cruzan en su camino. La maldición se convierte en una fuerza destructiva que amenaza con acabar con la vida de todos los involucrados.
Intento de huida de Peñaranda
En un intento desesperado por escapar de las consecuencias de la maldición, Peñaranda decide huir con el dinero robado. Sin embargo, su esposa se niega a acompañarlo, lo que lo deja solo y vulnerable. Este intento de huida marca un punto de inflexión en la trama y lleva a una serie de eventos que cambiarán el curso de la historia.
Interrogatorio y demostración de poder de «El Orejón»
Después de que Peñaranda es capturado por «El Orejón», este último lo somete a un interrogatorio brutal. Durante este interrogatorio, «El Orejón» asesina a un hombre al azar para demostrar su poder y su disposición para hacer cualquier cosa para recuperar el dinero robado. Esta demostración de poder deja claro que Peñaranda está en una situación desesperada y que su vida está en peligro.
Orden de matar a Benítez
En un giro inesperado, «El Orejón» le ordena a Peñaranda que mate a Benítez. Esta orden pone a Peñaranda en una situación difícil, ya que Benítez es su compañero y amigo. Sin embargo, Peñaranda se ve obligado a cumplir con la orden para salvar su propia vida y la de su familia.
Ritual en el cementerio y muerte de Don Pablo
Benítez cumple con un ritual en el cementerio para intentar deshacerse de la maldición. Durante este ritual, se revela que Don Pablo, el jefe de «El Orejón», ha muerto. Esta noticia tiene un impacto significativo en la trama y lleva a una serie de eventos violentos que culminarán en el desenlace final.
Lealtad demostrada y amenazas
Para demostrar su lealtad a «El Orejón», Peñaranda descuartiza vivo al «Mellizo», uno de los hombres de confianza de su jefe. Esta acción extrema muestra hasta qué punto Peñaranda está dispuesto a llegar para proteger a su familia y asegurar su propia supervivencia. Sin embargo, a pesar de su lealtad, «El Orejón» continúa amenazando a Peñaranda y a su familia, lo que aumenta la tensión y la violencia en la trama.
Asesinato de «El Orejón»
En un giro sorprendente, Peñaranda y Benítez deciden unir fuerzas para matar a «El Orejón». Esta decisión marca un punto de inflexión en la trama y lleva a un enfrentamiento final lleno de violencia y sangre. Peñaranda y Benítez se enfrentan a «El Orejón» y logran matarlo, poniendo fin a su reinado de terror.
Violencia y muerte de Peñaranda
A pesar de haber logrado matar a «El Orejón», la violencia no termina ahí. Peñaranda continúa su camino de destrucción y muerte, matando a un policía y al gerente del hotel donde se hospedaba. Sin embargo, su violencia finalmente se vuelve en su contra cuando es golpeado hasta la muerte por el hombre que buscaba a Adela, una mujer que había sido secuestrada por «El Orejón».
Benítez huye con el dinero y muere atormentado
En el desenlace final de «Perro come perro», Benítez logra huir con el dinero robado. Sin embargo, su victoria es efímera, ya que la maldición lanzada por la bruja Iris continúa atormentándolo. Benítez muere en soledad y desesperación, llevándose consigo el peso de sus acciones y la maldición que lo persiguió hasta el final.
El final de «Perro come perro» es un desenlace lleno de violencia y tragedia. Los personajes principales se ven atrapados en un ciclo de muerte y destrucción, y la maldición lanzada por la bruja Iris tiene consecuencias devastadoras para todos los involucrados. A través de una serie de giros inesperados y eventos violentos, la película explora temas como la lealtad, la venganza y las consecuencias de nuestros actos. El desenlace final deja al espectador con una sensación de desesperación y reflexión sobre la naturaleza humana y los límites de la violencia.