La película La voluntaria es un drama dirigido por Dora García que aborda temas como la migración, la ayuda humanitaria y la injusticia social. A lo largo de la trama, se exploran diferentes aspectos de la sociedad contemporánea y se cuestionan las dinámicas de poder y las contradicciones de los personajes. En este artículo, analizaremos el final de la película y ofreceremos una crítica detallada de sus principales temas y mensajes.
La ambivalencia y contradicciones de los personajes
Uno de los aspectos más destacados de La voluntaria es la forma en que retrata la ambivalencia y contradicciones de sus personajes. A lo largo de la película, vemos cómo los personajes se debaten entre sus deseos personales y su compromiso con la ayuda humanitaria. Por un lado, quieren hacer el bien y ayudar a los demás, pero por otro lado, también tienen sus propias necesidades y deseos.
Esto se refleja especialmente en la protagonista, interpretada por Carmen Machi, quien transmite una sensación de incomodidad y desorientación a lo largo de la película. A medida que avanza la trama, vemos cómo su personaje lucha por encontrar su lugar en el mundo y por reconciliar sus propias contradicciones internas.
La sensación de inutilidad de las personas jubiladas
Otro tema importante que aborda La voluntaria es la sensación de inutilidad que experimentan las personas jubiladas. A lo largo de la película, vemos cómo los personajes mayores se sienten estigmatizados y marginados por la sociedad. Se sienten como una carga y como si estuvieran estorbando en lugar de ser valorados por su experiencia y sabiduría.
Esta sensación de inutilidad se refleja en la protagonista, quien decide unirse a una ONG para encontrar un propósito en su vida después de la jubilación. Sin embargo, a medida que avanza la trama, se da cuenta de que incluso en ese contexto, su voz y sus habilidades son ignoradas o minimizadas.
Crítica a las dinámicas de las redes de ayuda humanitaria
Una de las críticas más contundentes que plantea La voluntaria es hacia las dinámicas de las redes de ayuda humanitaria. A lo largo de la película, se cuestiona el discurso buenista y se muestra cómo muchas veces las organizaciones y los voluntarios están más preocupados por su propia imagen y por cumplir con sus propias agendas que por ayudar realmente a las personas necesitadas.
Esta crítica se hace evidente en los diálogos entre los personajes jóvenes de la ONG, quienes revelan la vacuidad de su discurso y los tópicos en los que se aferran. Se muestra cómo muchas veces la ayuda humanitaria se convierte en una forma de lavar la conciencia y de sentirse bien consigo mismos, en lugar de abordar las causas profundas de los problemas y luchar por un cambio real.
La actitud distante e hipócrita de Europa hacia los migrantes
Otro tema que se aborda en La voluntaria es la actitud distante e hipócrita de Europa hacia los migrantes. A lo largo de la película, se muestra cómo los personajes europeos se preocupan más por su propia comodidad y seguridad que por la situación de los migrantes y refugiados.
Esto se refleja especialmente en el personaje de la jefa de voluntarios de la ONG, quien representa la actitud distante e hipócrita de Europa hacia los migrantes. A pesar de su discurso de solidaridad y ayuda, en realidad se preocupa más por mantener su posición de poder y por proteger su propio estatus quo.
La ceguera del privilegio y la falta de justicia social
Uno de los temas más importantes que aborda La voluntaria es la ceguera del privilegio y la falta de justicia social. A lo largo de la película, se muestra cómo los personajes privilegiados no son conscientes de sus propias ventajas y de las desigualdades que existen en la sociedad.
Esta ceguera del privilegio se refleja en la actitud de los personajes europeos hacia los migrantes y refugiados. A pesar de estar en una posición privilegiada, no son capaces de comprender la realidad de aquellos que se ven obligados a abandonar sus hogares y arriesgar sus vidas en busca de una vida mejor.
La falta de voz del niño refugiado y la caridad vs. justicia social
Finalmente, La voluntaria también aborda la falta de voz del niño refugiado y plantea la diferencia entre la caridad y la justicia social. A lo largo de la película, el niño refugiado es retratado como un personaje silencioso y sin voz, lo que destaca la falta de atención y reconocimiento que reciben los más vulnerables en la sociedad.
Esta falta de voz del niño refugiado también plantea la diferencia entre la caridad y la justicia social. A lo largo de la película, se muestra cómo la caridad puede ser una forma de aliviar la conciencia y sentirse bien consigo mismo, pero no necesariamente aborda las causas profundas de los problemas y lucha por un cambio real.
La voluntaria es una película que aborda temas importantes como la migración, la ayuda humanitaria y la injusticia social. A través de la ambivalencia y contradicciones de sus personajes, la película cuestiona las dinámicas de las redes de ayuda humanitaria y la actitud distante e hipócrita de Europa hacia los migrantes. Además, plantea la ceguera del privilegio y la falta de justicia social, así como la diferencia entre la caridad y la justicia social. En definitiva, La voluntaria es una película que invita a la reflexión y al cuestionamiento de nuestras propias actitudes y acciones en relación con los demás.
