1- Sinopsis
La aspirante es una película que aborda la obsesión por la superación y la búsqueda de la perfección en el mundo del ballet. La trama sigue a una joven bailarina llamada Vicky, quien sueña con convertirse en la mejor bailarina del mundo. Sin embargo, su camino hacia la cima se ve obstaculizado por su propia inseguridad y por la presión que ejerce su madre, quien también fue bailarina y quiere que su hija alcance el éxito que ella nunca logró.
Vicky comienza a obsesionarse con su cuerpo y su técnica, y se somete a una dieta extrema y a un entrenamiento riguroso para mejorar su rendimiento. Pero su obsesión la lleva a un agujero negro egocentrista, donde pierde la noción de la realidad y se aleja de las personas que la aman. Finalmente, Vicky se da cuenta de que su búsqueda de la perfección la ha llevado a un camino sin salida, y debe encontrar una manera de reconciliarse consigo misma y con su arte.
2- Elementos Cinematográficos
La cinematografía, la música y la dirección son elementos clave que contribuyen al significado global de La aspirante. La película utiliza una paleta de colores fríos y oscuros para reflejar la obsesión y la inseguridad de Vicky, y utiliza planos cerrados y ángulos bajos para mostrar su vulnerabilidad y su lucha interna.
La música también juega un papel importante en la película, con una banda sonora que combina piezas clásicas de ballet con música electrónica y ambiental. La música clásica refleja la pasión y la belleza del ballet, mientras que la música electrónica y ambiental refleja la tensión y la ansiedad de Vicky.
La dirección de la película es también notable, con una narrativa no lineal que salta hacia adelante y hacia atrás en el tiempo para mostrar la evolución de la obsesión de Vicky. La dirección también utiliza simbolismo visual para representar la lucha interna de Vicky, como la imagen recurrente de un espejo roto que refleja su fracturada autoimagen.
3- Su Significado
La aspirante aborda temas profundos y complejos relacionados con la obsesión por la superación y la búsqueda de la perfección. A continuación, se presentan algunos de los temas y mensajes más importantes que trascienden la trama principal de la película:
– La obsesión por la perfección: La película muestra cómo la obsesión por la perfección puede llevar a una persona a un agujero negro egocentrista, donde pierde la noción de la realidad y se aleja de las personas que la aman. La búsqueda de la perfección puede ser peligrosa y autodestructiva si no se maneja adecuadamente.
– La presión de los padres: La película también aborda la presión que los padres pueden ejercer sobre sus hijos para que alcancen el éxito que ellos mismos no lograron. La madre de Vicky, quien también fue bailarina, quiere que su hija alcance el éxito que ella nunca logró, y esto lleva a Vicky a una obsesión peligrosa.
– La representación del cuerpo: La película también explora la relación entre el cuerpo y el arte, y cómo la obsesión por la perfección puede llevar a una persona a desconectarse de su propio cuerpo. Vicky se somete a una dieta extrema y a un entrenamiento riguroso para mejorar su rendimiento, pero esto la lleva a perder la conexión con su cuerpo y su propia identidad.
– La importancia del equilibrio: La película muestra cómo el equilibrio es esencial para la vida y el arte. Vicky se da cuenta de que su obsesión la ha llevado a un camino sin salida, y debe encontrar una manera de reconciliarse consigo misma y con su arte. La película muestra que la búsqueda de la perfección debe estar equilibrada con la aceptación de uno mismo y la conexión con los demás.
4- Final Explicado
El final de La aspirante es un momento poderoso y simbólico que representa la reconciliación de Vicky consigo misma y con su arte. Después de una crisis emocional en el escenario, Vicky se da cuenta de que su obsesión la ha llevado a un camino sin salida, y decide abandonar el ballet y buscar una nueva forma de expresión artística.
En la última escena de la película, Vicky se encuentra en un parque, donde ve a un grupo de niños jugando y bailando. Vicky se une a ellos y comienza a bailar de forma libre y espontánea, sin preocuparse por la técnica o la perfección. Esta escena representa la liberación de Vicky de su obsesión y su conexión con su propia creatividad y espontaneidad.
La escena también tiene un simbolismo más profundo, ya que representa la conexión de Vicky con su propia infancia y su inocencia perdida. Vicky se da cuenta de que su obsesión la ha alejado de su propia identidad y de las cosas simples y hermosas de la vida, como la alegría de bailar con los niños en un parque.
En resumen, La aspirante es una película poderosa y conmovedora que aborda temas profundos y complejos relacionados con la obsesión por la superación y la búsqueda de la perfección. La película utiliza elementos cinematográficos, como la cinematografía, la música y la dirección, para contribuir al significado global de la película. La película también presenta temas y mensajes importantes, como la obsesión por la perfección, la presión de los padres, la representación del cuerpo y la importancia del equilibrio. El final de la película es un momento poderoso y simbólico que representa la reconciliación de Vicky consigo misma y con su arte.
La ambición de Alex en el equipo de remo
La película «La aspirante» nos sumerge en la historia de Alex Dall, una joven estudiante universitaria que se une al equipo de remo de su universidad con una ambición desmedida por superar las mejores marcas y escalar posiciones rápidamente. Desde el principio, queda claro que Alex no está dispuesta a conformarse con ser una simple participante, sino que busca destacar y convertirse en la mejor.
Alex: su propia amiga y enemiga
A lo largo de la película, Alex se convierte en su propia amiga y enemiga. Si bien tiene un gran deseo de superación y se esfuerza al máximo para lograrlo, también se exige demasiado y se pone metas inalcanzables. Es ella misma quien se persuade a sí misma de que debe ser perfecta en todo momento y no permite que nadie le diga lo contrario. Esta actitud autodestructiva la lleva a un estado de obsesión constante por la superación.
La exigencia interna de Alex
A diferencia de otras películas en las que hay un agente externo que demanda más de lo que el protagonista puede dar, en «La aspirante» no hay nadie más que Alex misma quien se exige al máximo. No hay un entrenador o compañeros de equipo que la presionen más de lo necesario, sino que es su propia exigencia interna la que la lleva a sobrepasar sus límites físicos y mentales.
La actitud bondadosa del profesor
A pesar de la obsesión de Alex por la superación, su profesor muestra una actitud de bondad y se preocupa por su bienestar y objetivos. A lo largo de la película, vemos cómo el profesor intenta guiar a Alex y ayudarla a encontrar un equilibrio entre su ambición y su salud mental. Aunque en ocasiones puede parecer que el profesor no la comprende del todo, en realidad está ahí para apoyarla y recordarle que no todo se trata de ganar a cualquier costo.
Un tono elevado y agotamiento psicológico
«La aspirante» no da tregua al espectador. Desde el principio, la película mantiene un tono elevado y un ritmo frenético que refleja el agotamiento psicológico al que se somete Alex. No hay puntos muertos ni momentos de descanso, todo está enfocado en mostrar la obsesión de Alex por la superación y cómo esto la lleva al límite de sus capacidades.
El simbolismo del agujero negro egocentrista
En un plano cenital, se muestra una embarcación de competición flotando en aguas ennegrecidas. Este simbolismo puede representar un agujero negro egocentrista que absorbe todo a su paso. Alex se ve atrapada en este agujero negro de obsesión y superación constante, sin poder escapar de su propia ambición desmedida.
El cuerpo como protagonista de excesos y estigmatización
Una vez más, el cuerpo se convierte en protagonista de excesos y sufrimiento en «La aspirante». Alex se somete a entrenamientos extremos y sufre lesiones en sus manos, con úlceras sangrantes que reflejan el esfuerzo físico al que se somete. Además, el cuerpo de Alex también es estigmatizado, ya que se espera que tenga un aspecto perfecto y atlético en todo momento.
Una atmósfera subterránea y sofocante
La película utiliza una cámara nerviosa y planos cerrados para crear una atmósfera subterránea y sofocante. A medida que la historia avanza, nos sentimos cada vez más atrapados en la obsesión de Alex y en su mundo de superación constante. Los espacios cerrados y oscuros refuerzan esta sensación de opresión y nos sumergen en la mente de la protagonista.
El montaje a ritmo de cronómetro
El montaje de «La aspirante» funciona a ritmo de cronómetro. Los cortes abruptos y la edición rápida reflejan la obsesión de Alex por la superación y la sensación de que el tiempo corre en su contra. Cada escena está medida y calculada para mantener el ritmo frenético de la película y transmitir la urgencia y la presión que siente la protagonista.
El infierno individual en un deporte de equipo
«La aspirante» muestra el infierno individual en un deporte de equipo. Aunque el remo es un deporte en el que se trabaja en equipo, Alex se siente constantemente sola en su lucha por la superación. A medida que avanza la película, vemos cómo se va alejando de sus compañeros de equipo y se aísla cada vez más en su obsesión por ser la mejor. El deporte se convierte en una batalla personal en la que solo importa su propio rendimiento.
Un final ambiguo y sin mensaje moralista
El final de «La aspirante» es ambiguo y no tiene un mensaje moralista claro. No se nos muestra si Alex logra alcanzar sus metas o si finalmente se da cuenta de que la superación no lo es todo. La película deja abierta la posibilidad de que Alex continúe en su búsqueda obsesiva de la perfección o que finalmente encuentre un equilibrio entre su ambición y su bienestar. No hay un mensaje claro de que la superación a cualquier costo sea positiva o negativa, dejando al espectador reflexionando sobre el tema.
